miércoles, 9 de noviembre de 2016

Microcuento



 Nikon D3200 | F/10.0 | 1/200 | 200.0 mm | ISO 200

Cuenta la leyenda que un día la luna bajó del cielo al mundo de los mortales. Bajó a un bosque, en el que se encontró a un lobo. Pasaron juntos toda la noche, corriendo entre los árboles, subiendo a lo alto de las montañas...
El lobo se enamoró de tan enorme belleza, se quedó totalmente prendido de su misterio, de su luz; sin saber que con la primera luz al alba, la luna se marcharía a los cielos de nuevo.
E, iluso de él, cada noche sube a lo alto de aquella montaña que juntos escalaron, y aúlla bien fuerte, esperando que ella vuelva, que pueda pasar una noche más a su lado, que le devuelva el corazón que aquella noche la luna le robó. Pero ella se mantiene en lo alto, observando al pobre lobo, sin saber que la esperará para siempre.

 (Swords, Dublín, Irlanda)

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